lunes, 31 de mayo de 2010

Regalo de Cumpleaños

Jessica y yo siempre fuimos inseparables, desde chicos que nos llevamos muy bien, hicimos todo juntos, jardín de infantes, escuela liceo y ahora ya pasando los 20 años de edad los dos, vamos a universidades diferentes, igual somos vecinos y a veces estudiamos y charlamos juntos. En ocasiones me pongo a pensar en ella como mas que una amiga, es que el tiempo pasa y esa nenita que usaba colitas en su pelo rubio y vestiditos rosados ahora era una mujer hecha y derecha, su cabello rubio fue teñido de rojo ardiente, en perfecto contraste con unos naturales ojos azules, capases de derretir a quien osara mirarlos, acompañados por una piel hermosa, suave y blanca como la nieve, aunque era delgada, no le faltaba nada de lo que una mujer debe tener, una cola bien parada y de forma perfecta, unos senos hermosos de tamaño promedio, una cinturita breve y divina...

Sus padres siempre fueron muy sobre protectores y nunca la dejaban en su adolescencia vestir "indecentemente" según las palabras de su madre, pero ahora que ya creció no le importaba llevarles la contra, su ropa siempre dejaba a los hombres deseando mas y a las mujeres locas de envidia, su atuendo habitual era una pollera negra tableada, cortísima dejando ver un par de piernas súper sexys, unas botas de cuero hasta las rodillas (de taco alto por supuesto) y en ocasiones con unas medias de red que le quedaban a la perfección, arriba casi siempre un top o algo cortito para que se vea el tatuaje que tiene en la parte mas baja de la espalda...

Fue en febrero pasado cuando decidimos ir de vacaciones a el este del país, el periodo de vacaciones de principio de año coincide con mi cumpleaños, así que fuimos a una casa de mis tíos en Punta del este que nos alquilaron por un precio razonable, éramos Jessica, yo, lucia, carolina (otras amigas inseparables) y marcos, mi mejor amigo. Era un día de calor que rajaba la tierra, cuando iba preparando mi bolso y dando los últimos ajustes al auto alquilado para el viaje, iba bajando las escaleras en mi casa con mi pesado bolso cuando suena mi celular, atiendo y es carolina diciendo que no iba a poder acompañarnos trate de convencerla pero no hizo caso aparentemente era una emergencia familiar, una lastima por que me hubiera encantado ver a caro en bikini asoleándose en la playa, tiene un cuerpo que a su edad la mismísima Luciana Salazar hubiera envidiado, mi amiga es una rubia preciosa, a diferencia de Jessica a ella le he dedicado varias noches.

Cruce a buscar a jess, al verla tan ligerita de ropa por el calor empecé a sentir ese cosquilleo en la entrepierna previo a la erección (nunca antes habia sentido algo asi por ella, era casi una hermana) así que decidí voltear antes de que mi verga se parara del todo y quedara avergonzado frente a ella…

Pasamos en el auto por lo de lucia, y una vez mas quede impactado por su belleza, uruguaya hija de inmigrantes japoneses, poseía unos rasgos asiáticos en su rostro increíblemente hermosos, a diferencia de jess y caro ella es mucho mas flaquita, igual no seria prudente de mi parte meterme con ella por que mi amigo, marcos la pretendía, ja, la pretendía cojer, pero pensar que ahora ya son novios….
Pasamos a buscar al marcos y después de ahí carretera hacia el este…

Ya no los aburro más con las preliminares:
Pasábamos nuestro cuarto día en la casa, día previo a mi cumpleaños, yo volvía de pasar todo el día en la playa súper tostado, eran las 8 de la noche, bah, atardecer… llegue y no encontré a nadie en casa (o eso pensé) decidí subir a mi cuarto compartido con mi amigo, cuando iba a abrir la puerta un sonido fuerte me atravesó por completo, un gemido fuerte y duradero el inconfundible timbre de voz de Lu… supuse que marcos había logrado su objetivo al fin y me quede ahí escuchando esa hermosa sinfonía un rato mas… los gemidos que salían de la boca de lucia eran fuertes y duraderos podía imaginármelos así en la cama ella con su cuerpito oriental sudado cabalgando sobre el miembro de mi amigo abierta totalmente de piernas para dejarse penetrar esa cochita rosada y seguramente deliciosa… no tarde en excitarme tanto que tuve que ir a darme una ducha de agua helada para bajar la tensión, me había calentado demás y si seguía así entraría a la habitación a sumarme a la fiesta pero no, no era buena idea, mas calmado después de la ducha baje solo con el pantalón puesto al living abrí un whisky y me dispuse a tomar, cuando llego jess…

Cargaba unas bolsas del súper y vestía nada mas su bikini en la parte de arriba y una pollerita, el sol a sus espaldas en el horizonte marcaba su perfecta figura en la entrada de la casa, nos quedamos así un instante apreciándonos descaradamente, hasta que le dije que pasara y se me uniera, nos sentamos en el sillón a beber whisky.
Bebimos y charlamos unos minutos. Hace tiempo venia pensando en ella como mas que una amiga y era hermosa asi que decidi hacer mi jugada:
- Has visto a lucia? dije
- No, la verdad esperaba que me acompañara al súper pero no vino, sabes donde esta?
- Eh... si, pero no te conviene ir a buscarla ahora mismo...
Me miro seriamente y me pregunto:
- En donde esta?
- En mi cuarto, con marcos, los escuche y estaban.... "pasándolo bien" -dije en tono lo mas divertido posible. ella me miro con expresión de sorpresa y echo a reír:
- No puedo creer que al fin Lu se animo a encararlo!!! -dijo entre risas.
- Deja de reírte Che , que al menos ellos la están pasando bien! - conteste.
- Por que decís eso? -Recuperando la compostura y bajando la voz hasta casi un susurro pregunto: -vos la estas pasando mal nene?

- Escuche lo que pense que escuche? Primero supuse que estaria jugando, una broma pasada de tono con un amigo, que chica no hace eso, pero cuando mi amiga empezo a acariciarme la cara, con una mirada que lo decía todo, decidi actuar: puse mi mano libre sobre su pierna y la fui acariciando lentamente y al no haber resistencia mi mano siguió por su cadera, fue cuando ambos dejamos los vasos en la mesita ratona y nos acercamos mas el uno al otro, su cara se acerco a la mía, y nos besamos, fue perfecto, el lugar el calor la poca ropa, el alcohol... mientras la besaba la abrase por la cadera, me senté en el sillón y ella se puso encima de mi, ya mi verga totalmente erecta sentía las palpitaciones de esa húmeda y caliente conchita que gritaba por atención, tome su perfecto culo con mis manos y lo estruje fuerte, luego procedí a quitarle el corpiño y liberar así unos pechos perfectos y como comprobé con mi boca suaves y delicados, deliciosos, devore golosamente ese par de pechos blancos jugando con mi lengua en esos pezones, ahora rígidos como el acero, lo cual me excito mas, la tome y la arroje contra el sillón, mi boca ahora exploraba su pancita bajando y bajando, quite desesperadamente con ambas manos tanto la breve pollerita como la parte de abajo de su bikini y debo confesar que no estaba preparado para tanta perfección, una vagina sin un pelito, pequeña apretada y con un color rosa hermoso todo esto mezclado con una fragancia que me llevo al éxtasis, una fragancia profunda y potente, sin aguantar un segundo mas comencé a devorar golosamente esa deliciosa vagina, mi lengua subía y bajaba una y otra vez desde el agujero de esa virgen colita hasta el delicioso y erecto clítoris, lo que causaba alaridos de placer en esa boquita deliciosa, continúe mi practica un buen rato mas, los jugos vaginales escurrían por los lados de mi ansiosa boca, ella con sus manos apretaba fuerte mi cabeza contra su ardiente entrepierna:
- Dale papi comeme toda! Ahh.... así... mas... -me hubiera encantado contestarle pero prefería seguir lamiendo y devorando ese manjar de la naturaleza....
Unos instantes mas, el grito de pasión mas desgarrador y jess se acabo en mi sorprendido rostro, digo sorprendido por que nunca antes una chica se había venido así en mi cara, el squirting era algo que solo había visto en pornografía, pero igual decidí beberme todo ese delicioso liquido, y no me arrepiento, es riquísimo. Su pecho todavía agitado volvió a recibir mi tratamiento mientras iba subiendo otra vez hacia su boca, después de besarnos un poco mas me dijo:
-Es el orgasmo mas rico que un chico me ha dado, pero ahora... -su mano comenzó a acariciar mi durísima verga- me toca devolverte el favor...
Con una sonrisa picara me indico que me sentara, se puso en cuatro en el piso con la cara sobre mi entrepierna, bajo lentamente el cierre de mi pantalón y grata fue su sorpresa al ver que yo no llevaba ropa interior, mi verga salio disparada casi como un misil y se quedo ahí esperando el tratamiento de la lengua de jess, ella comenzó entonces a acariciar lentamente de la base hasta la punta mi verga, cada vez mas rápido mientras acercaba su cabeza se detuvo un momento a milímetros de mi miembro y lo acaricio lentamente en el orificio con su juguetona lengüita, sus labios empezaron a jugar con la cabeza ya mas que colorada de mi verga dejándome incluso mas excitado, muy despacio como queriendo torturarme fue metiendo mi miembro mas y mas profundo en su boca revelando una extraordinaria capacidad oral, ya que yo estoy, bueno... digamos que bien dotado, el tratamiento que recibí de su boca fue excepcional, me habían hacho sexo oral antes pero nada como esto, su cabeza bajaba y subía dándome placer volviéndome loco, succionando cada vez mas fuerte, así siguió un buen rato mas, hasta que la tome por sus hermosos colorados cabellos ya que estaba al borde del orgasmo y al momento de acabarme la apreté contra mi para que se tragara todo el semen, jamás había acabado así, ella correspondiéndome, se trago toda la lechita.
Estaba agitado, el sudor corría por absolutamente cada rincón de mi cuerpo, no había lugar para pensar si estábamos haciendo algo bueno o malo, no importaba...
- Te gusto, bebe? -me dijo- Me encanto jess, sos hermosa -respondí- Entonces aprontate que la noche recién empieza -dijo en tono pervertido.
No tarde en levantar una erección nuevamente, esta vez ella misma se recostó en el sillón con sus piernas abiertas llamándome con su dedo pícaramente, me acerque, me puse encima de ella la abrase, su cuerpo es diminuto comparado con el mío, y la penetre con la fuerza de un huracán, estaba a 10mil grados, muy pero muy caliente las embestidas arrancaban gritos de su boca mezcla de placer y dolor, mi verga rompía ese frágil cuerpito, casi desgarrando una vagina estrecha y apretadita… seguimos un rato así, teniendo el sexo mas salvaje de nuestras vidas, ella se vino antes que yo, lo que causo sus quejas en los minutos finales, yo conciente de esto y de que no llevaba condón, decidí sacar la verga de esa hermosa cueva y acabar en su pancita a lo que ella no puso objeción, me recosté a su lado y dejamos que el momento pasara, juntos.
Vimos el reloj y ya habían pasado dos horas y media desde su llegada, decidimos ir al cuarto que ella compartía con Lucy que obviamente estaba vacío, mi asiática amiga seguía disfrutando de la verga de marcos en mi cuarto, la cama de jess era claramente mas cómoda que el sillón así que ahí pasamos el resto de la noche, seguimos haciendo el amor hasta entrada la noche cuando presas del cansancio caímos rendidos en el mas profundo de los sueños.
Mucho recuerdo de esa noche pero mi recuerdo mas patente fue lo ultimo que me dijo antes de caer dormida:

-Espero que hayas disfrutado tu regalo de cumpleaños, amor.